Versos del Martín Fierro

Un padre que da consejos
mas que padre es un amigo;
ansí, como tal les digo
que vivan con precaución:
naides sabe en que rincón
se oculta el que es su enemigo.
Yo soy toro en mi rodeo
y torazo en rodeo ajeno;
siempre me tuve por gueno
y si me quieren probar
salgan otros a cantar
y veremos quien es menos.
Al que es amigo, jamás
lo dejen en la estacada;
pero no le pidan nada
ni lo aguarden todo de él:
siempre el amigo más fiel
es una conducta honrada.
Para vencer un peligro,
salvar de cualquier abismo,
por esperencia lo afirmo:
mas que el sable y que la lanza
suele servir la confianza
que el hombre tiene en si mismo.
Debe de trabajar el hombre
para ganarse su pan;
pues la miseria, en su afán
de perseguir de mil modos,
llama en la puerta de todos
y entra en la del haragán.
Y ricuerde cada cual
lo que cada cual sufrió,
que lo que es, amigo, yo,
hago ansí la cuenta mía:
ya lo pasado pasó,
mañana será otro día.
El que obedeciendo vive
nunca tiene suerte blanda;
mas que con su soberbia agranda
el rigor en que padece:
obedezca el que obedece
y sera gueno el que manda.
Los hermanos sean unidos,
porque es la ley primera;
tenga unión verdadera
en cualquier tiempo que sea,
porque si entre ellos pelean
los devoran los de ajuera.
 Junta experiencia en la vida
hasta pa dar y prestar
quien la tiene que pasar
entre sufrimiento y llanto;
porque nada enseña tanto
como el sufrir y el llorar.
Lo que pinta este pincel
ni el tiempo lo ha de borrar:
ninguno se ha de animar
a corregirme la plana;
no pinta quien tiene gana
sino quien sabe pintar.
En el peligro ¡que Cristo!
el corazón se me ensancha,
pues toda la tierra es cancha,
y de esto naides se asombre:
el que se tiene por hombre
donde quiera hacer pata ancha.

José Hernandez. Poema Épico Argentino

Estos once versos fueron seleccionados por Jugadores Juveniles. Agosto 2007